Fue un beso tonto

Fue un beso tonto - Megan Maxwell

¡Hola viditas! Hoy vuelvo a traer una reseña de una autora que me gusta mucho y de la que he leído casi todos sus libros, se trata de Megan Maxwell. Se trata de un libro que publicó en el año 2010 y que ahora ha vuelto con una nueva edición de la mano de Esencia, que tengo que reconocer que me gusta más.

Detalles del libro:

Editorial: Esencia

Fecha de publicación: 29/11/2016

Número de páginas: 448

Presentación: Rústica con solapas

ISBN: 9788408162735

Olga y Clara son dos inspectoras de Policía acostumbradas a perseguir a delincuentes y a detener a infinidad de chorizos. En la última redada en la que participan uno de sus compañeros resulta herido.

Cuando lo acompañan al hospital, conocen a Alex, neurocirujano, y Oscar, pediatra, con los que rápidamente conectarán, y no precisamente para bien.

Sus vidas, sus mundos y sus vivencias son muy diferentes, pero cuando la pasión asalta sus corazones, ya nada vuelve a ser igual, porque como dice Olga, hay muchas maneras de salvar vidas: unas lo hacen con pistolas y otros con pijamitas verdes y gorritos de aviones.

Olga y Clara son dos chicas que les gusta vivir el momento, sin responsabilidades mayores que las de su trabajo como inspectoras de policía. No buscan el amor, pero todo cambiará cuando tengan que trabajar en una fiesta bajo una misión encubierta en la que podría haber un posible delito. Aquí uno de sus compañeros resulta herido y los mismos invitados de la fiesta, que estaba organizada por un hospital, serán los encargados de socorrerlo. Allí en el hospital conocerán a Álex, al que Olga ya había tenido oportunidad de conocer en la fiesta y a Óscar, con los que tendrán algún que otro encontronazo desde el principio, pero entre los que poco a poco irá surgiendo algo más.

Fue un beso tonto está narrado en tercera persona por un narrador omnipresente en una cronología lineal. Es un libro que tiene un ritmo de lectura bastante ágil y dinámico  desde el principio y que mantiene hasta el final del mismo, que se complementa entre narración, diálogos y acción entre sus páginas. Mucho tiene que ver en esto la pluma de la autora, que nos regala un lenguaje sencillo, fresco, divertido y algo gamberro.

La trama está muy bien construida y desde el principio nos sorprende con grandes giros y cambios en las vidas de nuestros protagonistas. Además de hacernos reír y de enamorarnos de los personajes, también nos hace reflexionar en las diferencias que aún hoy en día existen entre hombres y mujeres en el trabajo, la diferencias de clases o las profesiones que están mejor vistas según algunas personas. 

Los personajes me han gustado mucho, porque están muy bien perfilados y es muy sencillo reconocerlos durante la lectura, además me han parecido muy realistas, porque sienten miedo o se equivocan como cualquier persona. Pero si hay algo que caracteriza a su autora es por crear personajes femeninos fuertes, guerreros y que no se dejan amedrentar por nadie.

Olga trabaja como inspectora de policía y le encanta su trabajo, es una chica joven con las ideas claras, que le gusta disfrutar de la vida y que no tiene intención de atarse a nadie. Es guapa, divertida e inteligente, pero no ha tenido suerte en el amor ya que su última pareja le engaño e hizo sufrir durante su noviazgo, por lo que ahora ha decidido no entregarse a nadie más de la forma que ya lo hizo y que le dolió tanto. Vive con su abuela, que es el personaje más maravilloso de todos, adorable, divertida y con una pizca de locura genial, pero además un giro en su vida hará que tenga que enfrentarse a las responsabilidades que nunca quiso. La mejor amiga de Olga, es su compañera Clara, quien también tiene un carácter fuerte, pero que se deja llevar un poco más por su locura. En lo referente a los personajes masculinos encontramos a Alex un neurocirujano, guapo, rico, inteligente, seguro de sí mismo y muy atrevido. Y a Oscar un pediatra que cumple con las mismas características de Alex y que está acostumbrado a conseguir a cualquier chica, lo que hace que tenga el autoestima por las nubes.

En esta novela hay grandes historias de amor, porque aunque hay claramente una pareja protagonista, la autora siempre nos regala unos personajes secundarios muy fuertes y que al final terminan causando tanta curiosidad como los personajes principales. Tienen muchas similitudes entre ellas, porque están compuestas por dos mujeres guerreras y dos hombres acostumbrados a tener a cualquier mujer, por lo que no será nada fácil las relaciones. A lo que hay que sumarle los prejuicios, las relaciones pasadas, los miedos, los celos, traiciones, decepciones… Pero también deja paso a la pasión y al amor verdadero.

Están muy bien llevadas, porque son dos historias que se van surgiendo poco a poco, sin prisas y que cuando menos lo esperan lo que siente es algo mucho más profundo de lo que al principio buscaban. Si es cierto, que una de ellas es algo más precipitada que la otra, pero de igual forma me ha convencido bastante, aunque también me he enfadado y me han cabreado por ambos lados. Quiero decir, por parte de ella por no luchar o por no querer abrir los ojos y por parte de él, por querer cambiar algunos aspectos de la persona que tienes a tu lado y que te hace feliz.

Es una autora que le gusta hacer sufrir hasta la última página y en esta novela no podría ser de otra forma, por lo que no habrá nada claro hasta el final. Es cierto que me lo esperaba, pero me ha sorprendido por la forma que surge, con sorpresas y un broche final en forma de epílogo divertido y precioso.

En conclusión, Fue un beso tonto es una de las mejores novelas que he leído de Megan Maxwell. Me he encontrado con una trama bien construida, divertida y con unos personajes fuertes que me han hecho sonreír pero también enfadar en una historia que además nos hace reflexionar sobre los prejuicios que cometemos cuando conocemos a alguien.

Gracias a la editorial por el envío del ejemplar.